jueves, 29 de junio de 2017

Entre varias bajas dolorosas y muchos fichajes "incógnita"

Por fin se deshojó la margarita y la salida de otros dos hombres cruciales la temporada pasada ha tomado carácter oficial.
Ni Jacobo Trigo ni Javier Bonilla seguirán la próxima campaña en el Pontevedra y se suman a otros tres pilares fundamentales de la pasada Liga que ya habían abandonado la entidad hace bastantes fechas.
Así las cosas, hasta cinco titulares prácticamente indiscutibles del Pontevedra 16/17 dejan vacantes sus puestos y obligan al club a encontrar sustitutos con la suficiente capacidad como para tratar de sostener al equipo en los puestos altos de la clasificación.
Miguel Loureiro, Bonilla, Trigo, Barco (este último cedido por el Lugo y por tanto fuera del alcance real del Pontevedra) han dicho adiós y el quinto elemento al que me refiero no es otro que un Abel Suárez que si bien todavía no se ha despedido de nuestra ciudad y del equipo todo apunta a que seguirá el mismo camino de sus compañeros y dirigirá su carrera por otros derroteros.
Ha habido más bajas como es sabido y alguna bien importante como la de un Iker Alegre que vino para ser importante y al que esa dichosa lesión solo le permitió jugar los últimos compases de la competición.

El caso es que buena parte de la columna vertebral del Pontevedra CF ha decidido abandonar la nave (o el Consejo no ha conseguido evitar las "escapadas") y no le queda otra al cuerpo técnico que proceder a una especie de "reivención" del equipo para lograr un grupo fuerte que vuelva a ilusionar a una afición que asiste entre preocupada y expectante a la marcha de tanto hombre importante.
En estas dos últimas semanas los movimientos que se han producido (al margen de las bajas) abarcan la renovación en mi opinión acertada de Bruno Rivada y la llegada de tres nuevos jugadores: David Goldar, Carlos Ramos y Miguel Angel Muñoz.

El primero es un central (ocasionalmente podría actuar en el lateral derecho) de 22 años que venía muy fuerte en las categorías inferiores del Celta y que decidió dejar el club celeste para emprender una aventura en la Ponferradina que no salió del todo bien. Solo actuó de titular en seis ocasiones y su presencia en el conjunto berciano fe mucho menor de la que todo el mundo esperaba.
Pocos días después de su fichaje su nombre se veía envuelto en un feo y desagradable asunto que al parecer tiene como protagonista principal a su ex compañero en Vigo y ahora en Valencia Santi Mina.
Sobre este particular (además de la tan manida pero necesaria apelación al a presunción de inocencia de los participantes) no puedo dejar de comentar que a mi juicio ha faltado un comunicado oficial del Pontevedra CF por escueto que este fuera en el que se hubiera podido visibilizar la opinión de la institución sobre este tema y más cuando no resulta nada alentador que siquiera de pasada el nombre de la entidad se vea mezclada con algo tan poco edificante.

Carlos Ramos es un medio centro de carácter organizador que también cuenta con 22 años y que procede del Real Burgos con el que ha tenido una significativa aportación en la segunda vuelta de la Liga sin que en la primera parte de la competición haya contado apenas nada para su entrenador.
Se formó en las categorías inferiores del Atlético de Madrid y antes que en Burgos estuvo otro año cedido en Guijuelo.
Como anécdota respecto a este fichaje, se puede comentar que participó durante más de 70 minutos en el partido de vuelta de dieciseisavos de final de la copa en la temporada 13/14 disputado entre el primer equipo del Atlético y el Sant Andreu en el Vicente Calderón. Ese partido pero en el otro equipo lo disputó también nuestro Adrián Mouriño por aquel entonces enrolado en el equipo catalán que entrenaba Patxi Salinas. 
Carlos Ramos también disputó seis minutos en Copa la temporada siguiente esta vez frente al Hospitalet con el primer equipo rojiblanco.
Fue el autor del gol burgalés en Pasarón en el partido jugado en la segunda vuelta de la pasada Liga que al final logró remontar el equipo granate con goles de Alex González y Mario Barco.
En principio viene a distribuir y a tratar de aportar calidad técnica al centro del campo pontevedrés tras la salida de Gonzalo (este en Enero) y de Abel Suárez que eran los dos mediocampistas con más criterio a la hora de jugar la pelota.

Por último llega también Miguel Angel Muñoz ( no confundir con el actor que hizo sus pinitos como ¿cantante? con el grupo "Uppa dance" y que acabó escenario abajo en una de las actuaciones de ese conjunto musical salido de la serie "Un paso adelante").
Este futbolista llega del Getafe B con el que ha disputado la última Liga en el grupo madrileño de la tercera división en la que el conjunto azul terminó en la sexta posición.
Tiene 22 años pero a diferencia de los dos futbolistas anteriores ocupará plaza de sub 23 al haber nacido en el año 1995. 
Es lateral derecho y he de confesar que sus datos resultan algo confusos.

Me explico.

Hace dos temporadas jugaba con asiduidad en el filial getafense y fruto de su proyección actuó hasta en tres partidos con el primer equipo en primera división (en casa ante el Valencia y fuera en A Coruña y S.Sebastián).
Sin embargo, esta última temporada solo participó en la mitad de los partidos con el filial (también disputó tres minutos de un encuentro del primer equipo en segunda) y no gozó de la continuidad de la que venía disfrutando con anterioridad.

Con estos tres hombres ya son nueve las incorporaciones realizadas por el Pontevedra CF( Mongil, Anxo Pérez, David Castro, Adrían León, Marcos Alvarez, Echániz, Goldar, Ramos y Muñoz).

No voy a esconder que comparar esta lista de fichajes con los jugadores que se han ido me transmite cierta inquietud.
No se trata de prejuzgar a unos jugadores que vendrán aquí con las mayores ganas del mundo y dispuestos a comerse el césped y lograr los objetivos colectivos del equipo y particulares de cada uno de ellos pero no mencionar que la mayoría o llegan de tercera división o no han sido indiscutibles en sus equipos de procedencia sería faltar a la verdad.

Salvo León (que dejó de disputar algunos partidos por problemas físicos), Marcos Alvarez y quizá Echániz  los demás apenas han participado en la mitad de los partidos de la pasada Liga y ello unido a la innegable juventud de casi todos ellos a este atribulado bloguero le hace albergar serias dudas acerca de su capacidad para sustituir a gente tan relevante como la que se ha ido.

Está claro que en más de una ocasión Roberto Feáns y sobre todo Luisito han comentado que el Pontevedra de hoy en día debe apostar por gente con hambre y proyección que tenga intacta su ilusión por hacer carrera en este mundo del fútbol y "explote" de verdad vistiendo la camiseta granate.
Y es verdad que la temporada pasada hemos visto ejemplos claros de tal circunstancia.
¿Quién habría apostado al conocer su fichaje por el rendimiento de Bonilla, o por la evidente mejoría de Miguel Loureiro o Bruno e incluso la chispa de Alex González?

Pero lo que tampoco podemos negar es que cuando nos enteramos de fichajes como los de Trigo, Alegre, Suárez o Barco comprendimos que el Pontevedra había dado ese pasito adelante anunciado y había traído gente con peso para intentar mejorar lo conseguido anteriormente.

Mi sensación (apriorística evidentemente y como tal a lo mejor equivocada) es que en la lista de fichajes para esta temporada no existe tanto nombre que produzca esa ilusión vivida hace un año cuando nos enteramos de algunos de los futbolistas que vendrían a jugar aquí.

Tan solo Adrián León y quizá Marcos Alvarez que creo es más jugador de lo que alguna gente cree me despierta cierta fiabilidad en cuanto a su rendimiento y experiencia.

También es verdad que al equipo le faltan tres o cuatro jugadores por adquirir.  

Vendrá con seguridad un lateral zurdo, un delantero centro y otro hombre ofensivo.

Mi opinión es clara, estas últimas piezas deberían ser aquellas a las que el propio Roberto Feáns se refería cuando en alguna entrevista reciente decía que marcarán diferencias e ilusionarán a la afición.
Necesitamos que sino los tres al menos dos de esos hombres ( a ser posible los de arriba) sean jugadores importantes, con jerarquía y generadores de ilusión para una grada que ha visto como su equipo titular se ha roto por los cuatro costados.

Por supuesto que es posible que luego Carlos Ramos se salga y timonee el juego de ataque en el medio con categoría, que Muñoz se asiente como Miguel en el lateral, que Etxaniz las meta hasta con el trasero y Mongil o Goldar se vuelvan inexpugnables atrás. Todo eso es posible y debe dársele al Consejo de Administración el beneficio de la duda pues estas tres últimas campañas la mayoría de los fichajes han acabado por dar un buen rendimiento.  

Pero no se puede olvidar que el objetivo de este año (sí, con humildad y sabiendo donde estamos ya lo sé) es tratar de repetir lo del año pasado y que eso es muy  difícil si no se cuenta con determinadas piezas en un equipo que aporten serenidad, experiencia y bastante buen fútbol en las piernas.

Hasta ahora lo que ha venido parece que nutre a la plantilla de juventud, descaro y ganas de crecer pero en esta fase de verano en la que entramos lo que se debe conseguir es a esa gente que sepa sufrir y que cuando los partidos estén de "no quiero" se saquen algún conejo de la chistera que los devuelva a la senda correcta.

Todavía quedan casi veinte días para empezar a entrenar y hay tiempo para buscar y elegir con mimo estos últimos fichajes. 
Quizá esté totalmente equivocado y el perfil de los mismos sera parecido a los que ya han llegado pero (a lo mejor soy un ingenuo) confío en que esos jugadores sean punteros para la categoría y doten a la plantilla de ese gol y de ese "picante" que resulta imprescindible para estar arriba en este eterno pozo de la segunda división B.  
   
           

miércoles, 14 de junio de 2017

Primeros trazos del Pontevedra que viene

Avanzan los días del mes de Junio y con el paso de los mismos empieza a configurarse la plantilla del Pontevedra CF 2017/18.

Cinco han sido los jugadores granates que hasta el día de hoy 14 de Junio han decidido aceptar la oferta de renovación de la comisión deportiva. Edu Sousa, Adrían Mouriño, Alex Fernández, Alex González y David Añón seguirán en la entidad y se unen a un Kevin Presa que tenía contrato en vigor y sobre el que aparentemente no sobrevuelan este verano los "cantos de sirena" de posibles ofertas como sí sucedió el verano pasado.

Con otras piezas ya descartadas por haber rechazado la propuesta de continuidad, siguen siendo cuatro los hombres que mantienen el pulso y siguen sopesando cual será el equipo para el que jugarán la temporada que viene.
No son cuatro jugadores cualquiera. Bruno, Trigo, Bonilla y Abel han sido titulares a lo largo de toda la campaña pasada y desde luego no les faltarán ofertas al margen de la ya ofrecida por el Consejo de Administración.
Cada día que pasa sus renovaciones parecen más complicadas pues el club una vez terminado el plazo que les concedió para contestar ya peina el mercado para encontrar futbolistas que sustituyan a estos jugadores que tan importantes fueron en este ejercicio recién terminado.
A pesar de lo anterior, dada la importancia del papel protagonizado por todos ellos sobre el césped no se puede descartar que alguno (según se cuenta en los mentideros las posturas con Bruno no están tan separadas) acabe firmando su renovación por el Pontevedra.

Pero la comisión deportiva no se ha quedado parada ni lamiéndose en exceso las heridas por las decepciones de las salidas de Miguel e Iker y las dificultades encontradas para renovar a titulares indiscutibles del pasado año.
En muy poco tiempo se han anunciado nada menos que seis incorporaciones que buscan paliar el desasosiego o incluso desánimo que parte de la parroquia granate pudiera estar experimentando ante la fractura casi total del bloque que tan buenos resultados obtuvo este último curso futbolístico.

De esos jugadores fichados sobresale, en mi opinión, Adrián León, 27 años, procedente del UD Logroñés.
Es un jugador alto (1,90) que puede desenvolverse como mediocentro defensivo o de central dada su envergadura y que ya jugó de titular aquel Pontevedra- Logroñés de hace un par de campañas que se decidió con un solitario gol del Iker Alegre que por aquel entonces también jugaba en el equipo riojano.
Aquel día, Adrían León demostró contundencia y oficio en las labores de contención de mediocampo y con su llegada es posible que el Pontevedra haya encontrado además de fortaleza y presencia a la hora de contrarrestar el juego de ataque rival, buenas dosis de oficio y saber estar que tanto le hizo falta a este equipo en algunos momentos de la pasada temporada.

Otro fichaje anunciado estos días es el de Marcos Alvarez que hará 29 años en los próximos días. 
Es Marcos un jugador sobradamente conocido para los aficionados al fútbol gallego. En el Racing de Ferrol ha disputado un par de play off de ascenso a segunda con importante participación en las alineaciones y últimamente ha jugado unos meses en la Cultural (cedido por el Racing en la segunda vuelta de la 15/16) y la campaña pasada en el Boiro.
Es un interior derecha bastante clásico en el sentido de que no es un segundo delantero acoplado a banda. Tiene velocidad, desborde, experiencia y puede dotar de equilibrio a esa banda derecha granate.

Llega también David Castro, central o lateral izquierdo de 21 años procedente del Céltiga y que ya perteneció hace años al equipo juvenil del Pontevedra.
Ocupará plaza de sub-23 y es previsiblemente un fichaje de futuro. Como todas las incorporaciones ha firmado por un año con lo que de sorprender y hacerse con un puesto en el once podría pasarnos algo parecido a lo ocurrido con un Miguel Loureiro que se ha acabado marchando sin dejar un euro en las arcas de la entidad.

Jon Etxániz llega desde el Gernika (Grupo II de la 2ªDivisión B). Sus números no son malos pues ha conseguido hacer trece goles con este modesto equipo vasco y nueve en la anterior temporada con el Leioa, equipo en el que coincidió con Bonilla.
Cuenta con 26 años y al parecer destacaba bastante en la cantera del Athletic Club de Bilbao en la que se formó. Una serie de lesiones sufridas ya hace tiempo pararon un tanto su progresión pero estas dos campañas se ha recuperado y los goles marcados más los minutos disputados  parecen dar buena muestra de ello.
En mi opinión, su rol será parecido al de Mateu el año pasado. No es ese delantero referencia e importante que el Pontevedra intentará traer este verano pero tampoco parece haber llegado para efectuar labores de mero comparsa.

Los dos últimos fichajes se han anunciado hoy mismo. Por un lado, el central Victor Mongil de 25 años procedente del Mérida que esta última temporada acabó quinto en el grupo IV de la 2ªDivisión B. 
Se formó en las inferiores del Valladolid e incluso llegó a disputar algunos partidos en segunda con el primer equipo blanquivioleta en la 11/12. Luego se marchó al Atlético B, Alcoyano y finalmente al Mérida.
Al parecer también podría actuar de lateral derecho y en el conjunto extremeño no ha sido titular fijo disputando 21 de los 38 partidos de Liga.
Por último, Anxo Pérez es un portero de 21 años procedente del Fabril que tendrá la nada fácil labor de pelearle minutos a un Edu Sousa cuya titularidad bajo palos parece a día de hoy indiscutible.

Con estos seis fichajes más los seis jugadores que siguen del año pasado más los dos chicos de la cantera sin determinar todavía sus nombre pero que el club ha asegurado que formarán parte de la primera plantilla, el Pontevedra ya cuenta con 14 futbolistas.

La zona de medio campo es la que cuenta con más efectivos. Presa, Alex Fernández, Alex González, Marcos Alvarez, Mouriño y Adrián León (siempre y cuando el club piense en él para el medio campo y no el centro de la defensa).
La portería ya cuenta con dos inquilinos, la defensa con otros dos (Mongil y David Castro) y la delantera con otros dos (Etxániz y Añón).

Es evidente que de confirmarse la salida de los cuatro jugadores pendientes todavía de renovar al equipo le faltan siete u ocho jugadores más por incorporarse.
Todas las líneas verán nutridas sus filas con más fichajes y algunos de ellos intuyo que serán importantes y contribuirán a conformar un Pontevedra que saldrá a competir con la idea de colarse de nuevo en los puestos más altos de la Liga.

Queda mucho tiempo todavía para que la pretemporada comience y bastante más para que se cierre el periodo de fichajes. 
A buen seguro algunos de ellos llegarán ya con el Pontevedra entrenando y con algún partido de verano  a sus espaldas. Serán esos jugadores que habrán estirado lo máximo posible sus posibilidades para jugar en segunda y finalmente recaigan en importantes equipos de la categoría de bronce como el Pontevedra CF.

Fichajes como el de Adrián León parecen indicar que el Pontevedra va en serio y que esa idea de seguir creciendo sigue cumpliéndose en la práctica. 
Pero para salir de dudas por completo varios de los fichajes que faltan deberán cumplir el mismo guión que el del jugador cántabro procedente del Logroñés.

Se ha ido gente importante y en consecuencia tiene que llegar gente importante si se quiere volver a cumplir con el objetivo de partida que como es lógico cada vez es más complicado. 

Veremos si a lo largo del verano si esta circunstancia se va confirmando.      

miércoles, 7 de junio de 2017

De bajas, renovaciones, aspiraciones deportivas y alguna grieta en la familia

No se habían apagado del todo los ecos del partido de vuelta de la primera eliminatoria por el ascenso a segunda disputado en Murcia cuando las noticias relacionadas con la temporada que viene irrumpieron con fuerza en la actualidad granate.

Como ya viene siendo habitual desde la llegada del actual Consejo, los primeros días de trabajo y planificación sobre el futuro se dedicaron a reunir individualmente a los jugadores de la plantilla para ofrecerles la renovación o bien comunicarles el deseo del club de no contar más con sus servicios.
Esa política del Pontevedra CF de firmar por regla general contratos por una sola campaña provoca año tras año esta peregrinación de jugadores hacia las oficinas de la institución para salir de dudas acerca de su futuro.

Y esta misma política citada tiene sus "pros" y sus "contras". 

Entre los primeros, sin duda, destaca el que posibilita al Pontevedra CF no atarse demasiado en el tiempo con los jugadores a través de unos contratos largos que habría que pagar religiosamente (o al menos negociar en condiciones no muy favorables) aún en el caso de que la entidad decidiera no contar con ellos dentro del periodo de vigencia contractual.

Entre los "contras", también sin duda, a que se puede dar pié a situaciones como la que acabamos de vivir con Miguel Loureiro. 
El jugador ha decidido marcharse del Pontevedra con la carta de libertad y sin que la entidad reciba un solo euro por su traspaso. No podemos olvidar que Miguel llegó aquí hace años en una situación difícil y se le ha dado la confianza que necesitaba para recuperarse como futbolista e incluso despertar ahora el interés de conjuntos que militan en la LFP.
Por la juventud del lateral, por su indudable proyección el Pontevedra le puso por delante hace unos días un contrato de tres temporadas que al parecer ya se le ofreció el pasado mes de Febrero.
Pero el chaval dijo "nones"y a diferencia de lo que ocurrió hace un año con Kevin Presa que sí renovó y que entendió que no era el momento para salir, Loureiro ha tomado las de "Villadiego" dejando al club con un palmo de narices.

La de Miguel no ha sido la única renovación que no ha podido cristalizar el Pontevedra en los últimos días pues al mismo tiempo que supimos la marcha del defensa también nos enteramos de la salida de Iker Alegre al que tampoco satisfizo la propuesta de prolongación contractual ofrecida por la comisión deportiva. 
En el caso del asturiano ya sabemos incluso su destino a partir de Julio, el Caudal de Mieres que precisamente salvó la categoría al vencernos en la última jornada de Liga regular.
No ha debido quedar en muy buen estado la relación del Pontevedra CF con Iker Alegre a tenor de un mensaje publicado en su twitter por el asturiano (borrado muy deprisa, también es cierto) del que se deducía que la historia de este futbolista con alguien del club no había terminado digamos de forma idílica.
Son estos dos casos (junto al ya esperado de Canedo) los únicos que en el momento de escribir estas líneas se conocen de jugadores que no hayan aceptado la renovación ofrecida por la institución y que ponen de manifiesto que siendo muy loable el deseo del Consejo de Administración de tratar a su plantilla y cuerpo técnico de la forma más parecida a una familia, esta circunstancia y sobre todo cuando se llega unos determinados niveles de exigencia resulta más utópica que otra cosa.

Pero antes de que estos dos hombres decidieran separar sus caminos de los del Pontevedra, la comisión deportiva ya había anunciado cuales eran aquellos futbolistas con los que no se contaba para la 17/18.
He de confesar que salvo en uno de los casos la lista aparecida coincidía con aquella que el que esto escribe como aficionado había elaborado en su imaginación.

Tan solo el caso de Jacobo Millán me extrañó y disgustó al mismo tiempo. No es que Jacobo sea una estrella ni que pueda ser fácil concebir su titularidad en un Pontevedra que busque de nuevo la clasificación para un play off pero sí es cierto que tiene algunas cosas que lo hacen diferente y una buena pieza que guardar en el armario para echar mano de ella en situaciones especiales.
Tiene calidad, balón parado, buen disparo y último pase por lo que si he de ser sincero esperaba que siguiese al menos un año más defendiendo los colores del Pontevedra.

Las otras bajas, como ya he dicho, eran previsibles lo que no es óbice para recordar que hombres como Adrián Gómez o Capi vinieron al Pontevedra en una etapa complicadísima para nuestro equipo y dieron la cara para poner su granito de arena en el empeño de sacarnos de la tercera división y consolidarnos de nuevo en 2ªB. 
Así las cosas, ya son doce los jugadores que no seguirán en la entidad la próxima temporada (las siete bajas dadas por el club, es decir, Miki, Mateu, Jacobo, Adrían, Capi, Mateu y Portela; los dos cedidos que se marchan, Barco y Eneko; y los tres que ya han rechazado renovar) por lo que la intención primera expuesta por el club de mantener el bloque es ya imposible.

Han aceptado seguir por el momento Alex Fernández y Mouriño. Parece muy cercana la continuidad de Edu, Alex González y David Añón. Si hacemos caso a sus propias declaraciones parecen algo más dificiles (ni mucho menos imposibles) las de Bonilla, Bruno y Trigo (este último según el portal "lasegundab" con una oferta del Racing de Ferrol) y Abel Suárez no ha dicho por ahora esta boca es mía. 

El panorama parece complicado pero el director deportivo de la entidad, Roberto Feáns, entrevistado recientemente en "La Trastienda", mantiene la tranquilidad y está convencido de que se formará una muy buena plantilla.
En esa misma entrevista Feáns no dudó en admitir que con toda la humildad y sabiendo de la existencia de grandes equipos con mucho potencial económico, el Pontevedra va a salir a competir en Agosto con la sana intención de repetir lo conseguido en esta campaña, es decir, jugar otra vez play off por lo que parece que dentro de esa línea de sosteniblidad económica que la Presidenta ha citado muchas veces parece que el crecimiento del club lejos de pararse sigue sin prisa pero sin pausa hacia un lugar más acorde con todo lo que le rodea.

El trabajo a realizar estos meses parece ímprobo, Se ha ido mucha gente y no es descartable que se vayan más y eso implica que deberán incorporarse muchos nuevos jugadores y que habrá que acertar en un porcentaje altísimo para tratar de emular lo conseguido este año.     

Veremos lo que va pasando estos días y de que manera va conformándose el Pontevedra CF 2017/18.