Afronta el Pontevedra CF su debut liguero ante el Guijuelo y lo va a hacer como todos sabemos con casi todo el bloque con el que la temporada pasada se consiguió escapar de una tercera división que había conseguido engancharse a nuestros pantalones cual garrapata ávida de sangre fresca granate.
A dos días de alzarse el telón, nos encontramos con algunas incógnitas a despejar en torno al rendimiento del algunos hombres que en tercera han sido cruciales y que van a tener que seguir siéndolo en una categoría superior a tenor del planteamiento austero con el que la entidad ha afrontado este año del retorno.
En esta plantilla del ascenso cobraron verdadero protagonismo varios jugadores jóvenes y pertenecientes en mayor o menor medida a las categorías inferiores de la entidad.
Edu Sousa que ya había adquirido protagonismo hace dos campañas se erigió en indiscutible tanto con Manu Fernández como con Luisito y acabó por desterrar todas las dudas que en torno a su figura como portero granate se cernían periódicamente.
Por su lado, Kevin Presa (aparecido como por ensalmo en el play off de hace dos campañas) también logró convertir su nombre en sinónimo de indiscutible y con su trabajo táctico innegable dotó durante toda la temporada al equipo de ese equilibrio indispensable para que todo el colectivo pueda funcionar mejor.
No estamos hablando de posiciones secundarias para el once inicial del equipo sino de la portería y el medio centro de contención.
De su rendimiento (que presumo va a ser muy bueno) podría incluso salir beneficiado a más largo plazo el club pues hablamos de jugadores jóvenes y con proyección que de seguir en esa línea e incluso mejorando llamarán la atención casi seguro de equipos de categorías superiores que podrían dejar bolsas de oxígeno en forma de euros en el futuro.
Y hablando de jóvenes con futuro que decir de Pablo. Es cierto que con la llegada el pasado año de dos veteranos curtidos y además miembros de la guardia pretoriana del entrenador (incluso le precedieron en su llegada) como Campillo y Capi ha tenido que esperar casi siempre la ausencia de cualquiera de ellos del centro de la defensa para salir y exhibir sus cualidades.
Es Pablo un central aseado en la salida de balón, con un buen juego aéreo y un sentido de la anticipación notable. La incógnita es si no se conformará con su situación de "presunto" suplente y peleará por conseguir la titularidad confiando en sus posibilidades. El aliciente (para mi) es que lo consiga.
Al margen de los jóvenes, existen otras incógnitas individuales en torno al equipo que tendremos quizá la ocasión de despejar. Por ejemplo, ¿tendrá Mouriño un lugar en el once titular? y si lo tiene ¿ se asentará en un lugar determinado del campo o seguirá cambiando de posición con asiduidad?
La temporada pasada le hemos visto en el doble medio centro intentando construir; detrás del punta en una línea de tres mediapuntas; por la banda izquierda en un 4-4-2 e incluso en alguna ocasión (las menos) en banda derecha.
Es Adrián Mouriño un jugador con un balón parado notable y un disparo a puerta digno de mención pero muy dado a conducir y conducir la pelota en exceso provocando en ocasiones la ralentización del juego del equipo e incluso alguna pérdida en zona peligrosa.
Al finalizar la temporada pasada a muchos nos dio la sensación de que a un jugador importante como el no se le había sacado el jugo que tiene dentro y comprobar si este año Adrián Mouriño aumenta su rendimiento y se convierte en verdaderamente importante para el equipo es otra incógnita pero también otro aliciente de la temporada.
¿Qué decir de Anxo? A mi (lo confieso sin rubor alguno) me encantó al principio de la temporada pasada. Descubrí a un jugador eléctrico, veloz y con cierta calidad para el centro como demostró el día del Deportivo B al colocarle un balón medido a Jorge Rodríguez que remachó de cabeza un gol precioso.
Pero a medida que transcurrieron los partidos se fue apagando un poco su estrella hasta que por la falta de confianza en Lobato pasó a jugar la fase decisiva del campeonato en el lateral izquierdo. Ahí me desesperó. Me desesperó por su temeraria osadía a la hora de intentar regatear en los alrededores el área propia y por la facilidad de los rivales para ganarle su espalda.Era normal. Un casi extremo estaba ocupando un puesto de responsabilidad defensiva.
En principio me parece un acierto su continuidad pero para jugar en posiciones atacantes.Me parece un jugador ideal para romper partidos en su tramo final sobre todo cuando el marcador es favorable para el equipo.Me apetece verle en ese rol y ojalá explote esa velocidad indudable y el uno contra uno que posee para ayudar al equipo.
También podríamos hablar de Jacobo, impresionante tanto en la vuelta frente al Manzanares como contra el Haro. Su experiencia en 2ªB con el Compostela no funcionó pero es un jugador con una calidad técnica y un golpeo de balón importante que debería bastarle para ser importante para nosotros en 2ªB.
Podría seguir hablando de otros jugadores: ¿respetarán las lesiones a Capi?; ¿Recuperará Tubo si chispa dejando atrás sus problemas físicos? etc etc.
Pero el balón está a punto de empezar a rodar y con el paso de los partidos resolveremos estas dudas y comprobaremos el rendimiento de los seis jugadores nuevos que se han incorporado este año.
Lo que resulta innegable es que para este bloguero y abonado de a pié la ilusión que le despierta el comienzo de la competición para el Pontevedra CF no decae con el paso de los años.
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